MADRID, 10 (SERVIMEDIA)
El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, pidió este lunes “hacer compatible” el cobro de una ayuda con la percepción de salarios de bajos ingresos, como es la jornada parcial, para favorecer que más personas se incorporen al mercado laboral activamente.
Así se expresó Amor durante una rueda de prensa, en la que mostró su preocupación por el hecho de que falten trabajadores en sectores como la hostelería, transportes, construcción o nuevas tecnologías mientras que hay unos tres millones de parados.
Por ello, se reafirmó en que las ayudas son “muy necesarias” para las personas en situación de vulnerabilidad, pero se mostró “de acuerdo” con las palabras del líder de UGT, Pepe Álvarez, que abogó por replantearse si deben seguir cobrando ayudas las personas que rechacen empleos en condiciones adecuadas, si bien matizó posteriormente sus declaraciones.
“Hoy leía en Canarias que hacen falta trabajadores en la hostelería y que hay 27.000 personas en el paro de ese sector”, lamentó Amor, que criticó que haya gente en desempleo que rechace trabajos que están dentro de los convenios colectivos.
Además, dijo que “es importante y fundamental que copiemos a los países nórdicos”, refiriéndose a mejorar la compatibilidad entre el cobro de una ayuda y el acceso a empleos con salarios bajos, ya que impulsaría a muchas personas a activarse laboralmente sin miedo a perder el respaldo público que está percibiendo.
Esta reivindicación no sólo la dirigió al Gobierno central, son a las comunidades autónomas, que tienen ayudas que también pueden hacer compatibles.
Por otro lado, el también vicepresidente de CEOE, mostró la “voluntad” de la patronal para llegar a un acuerdo con los sindicatos sobre recomendaciones generales para la evolución de los salarios en convenios colectivos.
“Vamos a poner toda la carne en el asador para que haya acuerdo”, aseveró Amor, quien añadió: “Somos conscientes de que los salarios tienen que subir. Queremos un acuerdo y vamos a trabajar por ello”. Para ello, defendió la necesidad de trabajar con discreción y de que no existan “presiones” políticas en la negociación bilateral.
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