Asegura que no ha recibido comunicación del Ministerio para “reconducir la situación conflictiva existente”
MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
La Unión Progresista de Letrados de la Administración de Justicia (UPSJ) ha convocado nuevas jornadas de huelga para los días 9 y 10 de marzo, y el 5, 6 y 7 de abril y ya ha avisado que se trata de una medida “con carácter previo a una convocatoria de huelga indefinida si fuere necesario”.
La decisión de la asociación tiene lugar después de la jornada de huelga del pasado 26 de enero toda vez, según ha informado, no ha recibido comunicación o citación alguna por parte del Ministerio de Justicia para “reconducir la situación conflictiva existente”.
“Ninguno de los motivos que nos llevaron a la huelga han variado ni un ápice a día de hoy. El Ministerio sigue negando la necesidad de adecuación salarial y no quiere ni oír hablar de nuestra legítima negociación colectiva”, ha señalado la UPSJ en un comunicado emitido este viernes recogido por Europa Press.
Así las cosas, la asociación ha reafirmado su batería de reivindicaciones. Entre otras cosas, ha reclamado la presentación “en un plazo no superior a dos meses” por parte del Ministerio de Justicia de un borrador de modificaciones legales –a negociación con las asociaciones– para el pleno reconocimiento del derecho a la negociación colectiva propia de los letrados de la Administración de Justicia, “al margen de la que realizan de este Cuerpo los sindicatos generalistas de funcionarios”.
Ha exigido, además, un “acuerdo escrito, tangible y ejecutable para seguir avanzando en 2022 y 2023 en la adecuación salarial” de los Letrados de la Administración de Justicia, “de manera que se produzca una equiparación real y efectiva con el resto de grupos A1 de la Administración de Justicia”. Y ha solicitado también un nuevo sistema de retribución de las guardias de disponibilidad y permanencia.
BATERÍA DE REINVIDICACIONES
En el marco de las reivindicaciones han reclamado la “inmediata convocatoria de una mesa de negociación” con el único orden del día de aprobar una nueva norma que sustituya al Real Decreto 101/2019, que regulaba el régimen de sustituciones voluntarias del Cuerpo de letrados de la Administración de Justicia, toda vez que el mismo fue aprobado con el visto bueno del Ministerio de Economía y Hacienda y había cumplido todos los trámites válidos para su aprobación. “Los efectos de esa norma deberán ser retroactivos a las sustituciones que se hayan realizado durante 2021”, ha precisado la asociación.
Asimismo, ha exigido el “inmediato” establecimiento del complemento para los nuevos Encargados del Registro civil, “que garantice que perciban un salario bruto igual al que perciben los Magistrados Encargados”. Y, a su vez, ha insistido en que se fije un calendario de oposiciones al Cuerpo Superior Jurídico de Letrados de la Administración de Justicia.
Además, ha requerido que se incluya en la lista un calendario de negociación “serio y creíble” para “el impulso del resto de cuestiones organizativas y reglamentarias paralizadas en el área de letrados de la Administración de Justicia del Ministerio”: desde la modificación del Reglamento Orgánico del Cuerpo de LAJ, hasta la aplicación de una normativa de prevención de riesgos laborales.
La UPSJ ha asegurado que estas reivindicaciones “no han sido satisfechas a días de hoy, tampoco por el acuerdo que parecen haber alcanzado el Ministerio y el Colegio Nacional de Letrados de la Administración de Justicia”, del que dice no haber sido informada. “Este supuesto acuerdo es humo”, ha señalado la asociación.
JUSTICIA ABOGA POR EL DIÁLOGO
El secretario de Estado, Tontxu Rodríguez, y el secretario General para la Innovación y Calidad del Servicio Público de Justicia, Manuel Olmedo, mantuvieron ayer jueves una reunión con el presidente del Colegio Nacional de LAJ, Rafael Lara, y acordaron que el Ministerio de Justicia procederá a la modificación de aspectos concretos del estatuto del Cuerpo de Letrados que reclamaba desde hace tiempo la UPSJ.
Rodríguez valoró positivamente la reunión e invitó a la asociación a seguir esta misma vía, ya que “con diálogo se puede llegar a mejoras que, en última instancia, repercuten en un beneficio para toda la sociedad”.
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